CUIDAR EL TIEMPO

 

Daiana Rose

 

Texto de sala por Guille Mongan

 

La tortuga sin fin

Morla, aquella tortuga que vivía en el Pantano de la tristeza, consultada por Atreyu en la “Historia sin fin”, es para muchxs de nosotrxs la imagen inolvidable de la sabiduría del tiempo. Para escuchar a Morla había que atravesar tierras fangosas en las que se corría el riesgo de quedar atrapadx. Llegar al encuentro con Morla requería de paciencia. Nuestra tortuga sin fin, guardaba experiencia y cansancio, había cosas que ya no le importaban, pero no por ello dejaba de estar a disposición de quienes llegaban a su encuentro. Morla era gigante y su caparazón también podía ser, ante una mirada distraída, un cerro, una colina, una isla donde descansar para no hundirse. 

LaTortuga drag de Daiana Rose, descansa, pero en estado de ensoñación. Al igual que Morla, procura el tiempo al ritmo del otoño invierno, para que aparezcan respuestas. Tal vez  más preguntas. LaTortuga pelirroja y antropomorfa, es oráculo del hacer y de la materialidad. Contempla el ocio como potencia creadora. Habla suave y despacio o despacio y suave. En su hibernación insiste en revisitar el concepto de futuro como un tal vez. Así, adormilada nos susurra: “Cuando pensaste el propósito, era el que te iba a dar felicidad, pero puede ser que haya pasado algo en el camino (es que no sé) porque eso del propósito puede tener una expectativa muy alta. Bajarla quizás sea una manera de sintonizar a no sé, no sé, no sé, tengo sueño”. LaTortuga drag también es poeta.

 

La tortuga Pokémon

Squirtle es de agua, Torkal de fuego, ambxs, como todo Pokémon, tienen habilidades vinculadas a sus elementos, algunas visibles y otras ocultas. Lxs pokemones evolucionan, mutan. Ambas tortugxs pokemones, en sus mutaciones siguen conservando su caparazón. Fundamentalmente de hueso y recubiertos por una capa de piel dura, similar a la de las uñas humanas, los caparazones son casas escudos móviles que protegen todos los órganos internos de la tortuga, además de formar parte de su columna vertebral. El caparazón de Torkal en la vida pokemona provee fuego para cocinar, en la parte superior de su casa, tiene un hoyo cráter que calienta y cuece los alimentos para toda la comunidad. Paradójicamente, la dimensión sensible del caparazón no está asociada con su aparente dureza, sino que a través de él la tortuga siente y percibe, y algunos hasta llegan a ser flexibles. 

La cama caparazón pintada por Diana meticulosamente, escama a escama, dispuesta en el ambiente donde-todo-es-tortuga, se presenta como posibles devenires, mutaciones de las cualidades de nuestro reptil ancestral. Una habitación cueva para la lentitud. Para adentrarse en cada una de las escamas es preciso acercarse y —como en el cuento de Horacio Quiroga, donde el lomo de una tortuga gigante es reposo y posible cura— es necesario recostarse para emprender el andar. 

Un caparazón puede ser, colina, cerro, isla y cocina. También puede ser un armario donde guardar pequeñas colecciones, una cama donde caer, un lugar para la escucha. Un amigo dice: las tortugas van lento porque van lejos. 

 

La tortuga escudo

En distintas culturas la iconografía de la tortuga alude a valores, aparece como atributo de personajes mitológicos, es signo de estados espirituales y  de representaciones astrológicas. En su caparazón, cóncavo y convexo,  es capaz de albergar la bóveda celeste y la tierra. La tortuga, junto con el elefante, ha llegado a sostener el mundo, subvirtiendo relaciones de peso, fuerza y posibilidad. 

Al entrar en la muestra “Cuidar el tiempo”, Daiana Rose presenta a modo de  dibujo científico,  una radiografía sensible, hecha de carbonilla y pastel tiza, de la estructura interna y externa de su compañera de viaje: la tortuga.  Su caparazón está formado por el espaldar y el plastrón, los cuales se unen a través de unas estructuras óseas llamadas puentes. En él lleva trazadas escamas con distintos motivos según la especie. Se lo piensa generalmente como un elemento duro. Un escudo que la protege del mundo exterior. 

Con la temporalidad y la parsimonia de la pintura al óleo, Daiana elige investigar la  composición formal y cromática de las escamas. Con la lentitud que habilita el micro detalle, paso a paso va abstrayendo cada una de ellas, las aísla y las vuelve a unir, reconstruyendo así un gran caparazón geométrico compuesto de pequeños escudos sensibles y abstractos. 

 

La pintura refugio

Durante la hibernación los órganos y sistemas de la tortuga se reducen al mínimo. LaTortuga ha estado hibernando, ensoñada al abrigo de su “saquito de otoño” que la abuela decoró con puntillas al crochet. “Cuidar el tiempo” es una oda a la confianza en la lentitud y el antropomorfismo como posibilidad. Es la salida de LaTortuga al mundo que augura: “Cuando despierte de mi ensueño caminaré con perseverancia, segura de que cada paso me proveerá de manjares y sin duda estaré lista para apreciar el instante con mucha sabiduría”. 

 

Guille Mongan

La Plata, Junio 2023. 

Para Daiana y su tiempo. 

 

2023